¿Qué es el árbol de Gernika?
Es un árbol de gran importancia en la cultura del País Vasco y todo un icono que, hoy en día, representa la libertad de los vascos.
Significado del árbol
En la actualidad, el significado del árbol de Gernika es la libertad de los vascos. Veamos de dónde viene esa connotación:
En la antigüedad, el roble de Gernika era el lugar en el que el señor de Bizkaia (“gobernador” del señorío de Bizkaia) juraba respetar los fueros (leyes tradicionales vascas).
Por lo tanto, en un principio, el icónico árbol era un lugar asociado a las libertades tradicionales del territorio histórico de Bizkaia —asimismo, el arbol de Gernika es el símbolo central del actual escudo de Bizkaia—.
Sin embargo, con el paso de los años y la popularización del símbolo, el árbol de Gernika ha pasado a simbolizar las libertades tradicionales de todos los vascos.
Y, de hecho, actualmente el árbol sigue siendo el lugar donde los lehendakaris (presidentes del País Vasco) juran su cargo.
Historia del símbolo vasco
La historia del árbol comienza en el siglo XIV, con el comienzo de las juntas de los señores de Bizkaia.
En dichas juntas cada territorio del señorío enviaba a su representante a Gernika para debatir los problemas del señorío. Y aquellas juntas se celebraban en torno al árbol de Gernika.
Ahora: el árbol de aquellas primeras juntas y el actual no es el mismo.
Es más, aunque se le denomine árbol de Gernika, en realidad, hasta la fecha ha habido 5 árboles de Gernika. Y es que el primer árbol fue plantado en el siglo XIV, y, desde entonces, sus sucesores han nacido de retoños del árbol precedente:
- 🌳 Árbol padre (siglo XIV – 1742): árbol primigenio bajo el cual juraron los fueros de Bizkaia personajes como Fernando II o Isabel “la Católica”. Murió en el año 1811.
- 🌳 Árbol viejo (1742 – 1858): segundo árbol que vio el último juramento de los fueros por la regente Maria Cristina. Su tronco se conserva aún en un templete junto a la casa de juntas. Murió en el año 1892.
- 🌳 Árbol hijo (1858 – 2004): tercer árbol de Gernika. En 1936 Jose Antonio Agirre, primer lehendakari, juró su cargo bajo él. Desde entonces, todos los lehendakaris han seguido la tradición. Murió en el año 2004.
- 🌳 Primer sucesor (2005 – 2015): el árbol de Gernika menos longevo, que duró 10 años y murió en el 2015.
- 🌳 Árbol actual (2015 – Actualidad): el actual árbol de Gernika, que tiene una ubicación ligeramente diferente a la de sus antecesores para facilitar el despliegue de sus raíces.
Como ves: ¡Los árboles de Gernika cada vez nos duran menos! Detrás de eso posiblemente esté el hecho de que el emplazamiento del árbol no es el mejor para que se desarrolle.
A ese respecto, el primer sucesor de 2005 fue rodeado por una base y una zanja de drenaje de agua, entre otras medidas de preservación del árbol, pero, aun así, el árbol acabó muriendo.
Por suerte, el estado del árbol actual parece positivo.
Gernikako arbola, himno vasco
La tierra de los vascos es Euskal Herria, y, a día de hoy, no tiene un himno oficial. No obstante, hay una canción que es considerada el himno extraoficial de los vascos: Gernikako Arbola, del cantautor Jose Maria Iparragirre.
Dicha canción fue escrita en 1853, homenajea al árbol de Gernika y a los fueros vascos, y está escrita en métrica de zortziko (un ritmo vasco típico de 8 compases).
Gernikako Arbola
Jose Maria Iparragirre
Primera estrofa:
Gernikako Arbola
da bedeinkatua
euskaldunen artean
guztiz maitatua.
Eman ta zabal zazu
munduan frutua
adoratzen zaitugu
Arbola santua
Bendito es el Árbol de Guernica,
amado por todos los euskaldunes.
Da y extiende tu fruto por el mundo,
te adoramos, Árbol sagrado.
Es posible que parte de la letra te suene, porque ese “eman ta zabal zazu” (que significa «da y extiende») es el lema actual de la Universidad del País Vasco (UPV). Y no solo eso: el logotipo de la universidad, es, además, un árbol.
Y es que Gernikako Arbola es una canción de gran importancia porque rápidamente alcanzó una gran popularidad, reconocimiento y aceptación entre los vascos.
Y, de la misma manera, la canción sirvió para popularizar a Gernika y a su árbol como símbolos de libertad.
Gernika: lugar de la memoria vasca
El roble de Gernika es todo un símbolo vasco, ¡Pero es que la propia localidad de Gernika es también uno de los lugares más simbólicos del País Vasco!
Y es que, primero, Gernika es también, por extensión, símbolo de libertad, debido a su relación con los fueros, el autogobierno vasco, y el propio árbol.
Y eso es algo bien sabido entre los vascos, debido, principalmente, a la canción Gernikako Arbola de la que ya te hemos hablado.
Pero, por desgracia, también hay un suceso que hace que Gernika sea, además de un municipio simbólico, el epicentro vasco de la memoria: el bombardeo de Gernika.
En plena guerra civil, y apenas 6 meses después de la investidura del primer lehendakari bajo el árbol de Gernika, el pueblo sufrió un masivo bombardeo a la población civil.
En abril de 1937 Gernika fue bombardeado por los aviones de la Legión Cóndor, que fueron enviados por Hitler, en apoyo a los generales sublevados contra la república.
Y la catástrofe fue total: buena parte de la población de Gernika falleció y casi la totalidad de la villa fue reducida a cenizas.
Eso sí, el árbol de Gernika, algo alejado del casco urbano, sobrevivió al desastre.
Y si antes del bombardeo Gernika había estado popularmente ligada a la canción de Iparragirre, después de ese suceso la villa empezó a ser relacionada con un cuadro: el archiconocido Guernica* de *Pablo Picasso.
Otros retoños por el mundo
El árbol de Gernika es todo un símbolo de la cultura vasca y, cómo no, es conocido en todo el mundo, ¡Tanto que hay retoños del árbol de Gernika repartidos por todo el globo!
Según la propia Casa de Juntas de Gernika, que solo cede retoños del árbol a entidades e instituciones públicas, hay 441 retoños repartidos por el planeta.
Y es que hay robles que provienen del árbol de Gernika en Kenia, Australia, Argentina, Chile, Japón, Uruguay, EEUU… Y, de hecho, algunos están en lugares de gran simbolismo, como en la zona 0 de Nueva York.
¡Y también al revés! Porque en el jardín de la casa de juntas de Gernika existe un simbólico ejemplar de Ginkgo Biloba, retoño del árbol que sobrevivió a la bomba de Hiroshima. Si te pasas por Gernika, ¡A ver si lo encuentras 😉!