Lo primero que debes saber es que en euskera el orden de las palabras es muy diferente al del castellano.
Eso es así porque el euskera es una lengua en la que la estructura de las oraciones es muy libre, y en la que la propia posición de las palabras es de vital importancia para construir las frases.
¡Ahora, no te asustes! Porque ese orden puede parecer complejo al principio, pero es fácilmente entendible si tienes claro lo siguiente:
Tal que así, vaya:
Y esa premisa tan simple y básica es el eje de la estructura de las oraciones en euskera ¡Te lo prometemos!
Cómo ordenar las oraciones
Siguiendo esa idea que hemos expuesto, vamos a enseñarte a ordenar las oraciones afirmativas, negativas e interrogativas. Empecemos por las afirmativas:
Oraciones afirmativas
Como hemos dicho, el orden de las frases en euskera gira en torno al poner el elemento al que se quiere hacer énfasis (galdegaia) a la izquierda del verbo.
Véamoslo mediante ejemplos. Vamos a empezar por una frase común en la que hemos resaltado el verbo:
Mikel nire laguna da.
Mikel es mi amigo.
¿Qué te parece que es lo más importante de esa frase? Tanto el sujeto (Mikel) como su complemento (nire laguna) son relevantes y ambos podrían ser galdegaia, por lo que no hay un galdegaia concreto claro. Y, por eso, ponemos ambos elementos antes del verbo en este orden:
SUJETO + COMPLEMENTOS + VERBO
Es la estructura que debes utilizar cuando no tienes claro qué elemento quieres enfatizar.
Pero, vaya, ¡En el euskera lo más común es enfatizar un elemento de la oración! Y a eso vamos con el siguiente ejemplo, donde va a haber un galdegaia evidente:
Nire laguna da Mikel.
Mikel es mi amigo.
Esta frase se traduce al castellano de la misma manera que la anterior. Pero tiene un significado diferente, y es que en este ejemplo el énfasis no está en Mikel, sino en que es mi amigo. Y así lo marcamos poniendo da después del elemento importante: Nire laguna.
En el castellano ese énfasis se marca mediante la entonación sobre el verbo, pero en euskera lo marcamos a través del orden de la oración.
Es la frase que emplearías cuando, por ejemplo, alguien cuestiona si Mikel y tú sois amigos y quieres recalcar que sí, lo sois. Y por eso ese es el elemento que va antes del verbo.
Y, para acabar con las afirmativas:
Mikel da nire laguna.
Mi amigo es Mikel.
Finalmente, en este ejemplo el énfasis está en Mikel y por eso tiene da después. Por lo que es la frase que usarías si hablas de un grupo de gente y quieres recalcar que el que es tu amigo es Mikel y no otro.
¿A que no es tan difícil? Solo tienes que identificar la “parte importante” (galdegaia) de la frase y poner el verbo a su derecha. Y, cuando no tengas claro cuál es ese elemento importante, utiliza la estructura sujeto-complemento-verbo.
Oraciones negativas
Sin problema con las afirmativas ¿No? Pues vamos con las negativas. Para eso, primero, te voy a mostrar una oración afirmativa como las del punto anterior, y la vamos a convertir en negativa:
Xabi gimnasiora joan da.
Xabi ha ido al gimnasio
Para hacer la oración negativa se introduce ez (no) después del sujeto y junto al auxiliar del verbo. De esa manera, el ez (no) tiene función de galdegaia:
Xabi ez da gimnasiora joan.
Xabi no ha ido al gimnasio
Como ves, el joan da del primer ejemplo se ha dividido, porque su auxiliar ocupa una nueva posición. Si quieres profundizar sobre todo eso, lo explicamos en nuestro artículo de verbos.
Oraciones interrogativas
Y, para acabar con este punto, vamos a explicarte cómo se ordenan las oraciones interrogativas.
Es muy sencillo; para hacer preguntas se utilizan pronombres interrogativos como, entre muchas otros:
- Zein (cuál)
- Non (dónde)
- Zer (qué)
- Norekin (con quién)
- Etc.
Esas partículas funcionan como galdegaia y, por eso, suelen ir al principio y antes del verbo:
Zein da zure izena?
¿Cuál es tu nombre?
Ahora, también hay preguntas que se hacen sin usar dichos pronombres. Esas son las preguntas a las que se responde mediante sí o no, y funcionan con el orden de las oraciones afirmativas normales:
Bilbokoa zara?
¿Eres de Bilbao?
Otros consejos
Nosotros llevamos ya años enseñando euskera y sabemos cuáles suelen ser los mayores fallos en torno al orden de las palabras. Por eso vamos a darte un par de consejos que seguro que te servirán:
1. Recuerda que en euskera el verbo no va siempre al final de la oración
En este artículo te hemos explicado que el verbo va detrás del galdegaia, y que, por tanto, dependiendo de a qué se quiera hacer énfasis, el verbo irá en un lado u otro.
¡Y así es! Pero es que hay un rumor muy extendido que predica que en euskera el verbo va siempre al final.
Suponemos que eso viene de que las oraciones afirmativas en las que el galdegaia no está claro tienen el verbo al final ¡Pero es que casi siempre hay un galdegaia claro! Por lo que lo de que el verbo va siempre al final es un rumor que debes evitar.
2. Aurrerakarga
Hay veces en las se forman frases muy largas, sobre todo en textos jurídicos o en listas de elementos. En esos casos se recomienda no poner el verbo o su auxiliar al final para favorecer la legibilidad. Mira este ejemplo:
Lege proiektuaren helburua “gizarteratze-errenta orain prestazio bidezkoagoa izatea, behar eta eskari sozial berriei egokitua egotea eta, horretaz gainera, prestaziora heltzeko, prestazioa izapidetzeko eta zehapen-araubidea aplikatzeko garaian segurtasun handiagoa barneratzea” da.
Como ves, hay que leer un montón para llegar a ese da. Eso quiere decir que la oración no adquiere sentido completo hasta que llegas a su final. Imagínate que en vez de da, ahí llega a poner "ez da" ¡No te habrías enterado de que es una oración negativa hasta el final!
Por eso, en ejemplos como ese debes practicar la aurrerakarga, es decir, traer el verbo al principio (incluso poniendo el verbo antes del galdegaia, si es necesario), tal que así:
Lege proiektuaren helburua da “gizarteratze-errenta orain prestazio bidezkoagoa izatea, behar eta eskari sozial berriei egokitua egotea eta, horretaz gainera, prestaziora heltzeko, prestazioa izapidetzeko eta zehapen-araubidea aplikatzeko garaian segurtasun handiagoa barneratzea”.
Y no creas que la oración ha de ser kilométrica para que pase eso, porque en este otro ejemplo más corto también ocurre lo mismo:
Erakundekoak ez direla egin beharrekoak behar bezala egiteko gai diote ekologistek.
Ekologistek diote erakundekoak ez direla egin beharrekoak behar bezala egiteko gai.
