En euskera los sintagmas se declinan para adquirir significado, y esa declinación se hace siguiendo los sufijos de los famosos casos de declinación.
Además, cada uno de esos casos tiene 3 formas:
- Singular
- Plural
- Mugagabea (indeterminado).
Por ejemplo, esta es la tabla del caso de declinación NON que usamos para decir “dónde”:
Caso de declinación | Singular | Plural | Mugagabea |
---|---|---|---|
NON | -(E)AN | -ETAN | -(E)(TA)N |
La cosa es: ¿Cuándo usar cada unas de las 3 formas y, más en concreto, el mugagabe? Vamos a explicártelo:
Cuándo usar el mugagabe
Veamos: primero, el singular y el plural se utilizan cuando conocemos aquello de lo que hablamos. Aquí tienes un ejemplo del caso NON que te hemos mostrado en el anterior punto:
Olatzen etxean egingo dut lo.
Voy a dormir en la casa de Olatz.
Como la casa es conocida y singular, utilizamos el sufijo -(e)an. Con el plural habría sido –etan.
Ahora, vamos con el mugagabe, ¡De verdad que tampoco tiene ningún misterio especial!
Se utiliza cuando no conocemos aquello de lo que estamos hablando, por ejemplo:
Hiru lekutan egin dut lo.
He dormido en tres sitios.
¿Qué sitios son esos? ¿Los conocemos? No, y por eso hemos usado el sufijo de NON mugagabe –(e)(ta)n. Así de simple.
Ahora, para que no te calientes demasiado la cabeza pensando en si aquello de lo que hablas es conocido o no, a continuación tienes la lista completa de casos en los que se emplea el caso indeterminado.
Es una lista que parece larga y compleja, pero los principales casos con los que se usa el mugagabea son los primeros.
Así que, sin más dilación, el mugagabe se utiliza con…
Nombres propios
Esto como mejor se entiende es con ejemplos. Así usamos el mugagabea con nombres propios (izen bereziak):
Mikeli eman diot liburua.
Le he dado el libro a Mikel.
Pronombres personales
Los pronombres personales, por su parte, son las palabras que sustituyen a los participantes del discurso, como: ni (yo), zu (tú), etc. Aquí tienes un ejemplo con ellos:
Zurekin joango naiz.
Iré contigo.
Demostrativos
Y lo mismo con los demostrativos como hau (este/a), hori (ese/a), hura (aquel/aquella) y sus plurales:
Etxe horretan egiten dut lo.
Duermo en esa casa.
Interrogativos
Los propios interrogativos también se declinan en mugagabe, por ejemplo:
Nori eman diozu?
¿A quién se lo has dado?
Además, hay 3 determinantes interrogativos que son acompañados por sustantivos: zer, zein y zenbat.
Y los 3 exigen mugagabe también en el sustantivo que los acompaña:
Zein kaletara joango da?
¿A qué calle irá?
Eso no se aplica cuando dichas palabras tienen función exclamativa:
Zein polita den zure katua!
¡Qué bonito es tu gato!
Números, cuando no conocemos a quién se refieren
No es lo mismo 3 casas (no sabemos qué casas son), que las 3 casas (conocemos esas 3 casas), ¿No? Pues cuando no sabemos de qué hablamos, mugagabe:
3 neskak esan zidaten.
Me lo dijeron 3 chicas.
Pronombres indefinidos
Aquí tenemos pronombres como: ezer, inor, norbait, edonor, inon, etc.
Edonorrekin joan naiteke bertara!
¡Puedo ir ahí con cualquiera!
Determinantes indefinidos
Al igual que con los pronombres indefinidos, los determinantes homólogos necesitan también el caso indefinido.
Algunos de los indefinidos más comunes son: edozein, zenbait, hainbat, honenbeste, horrenbeste, hainbeste, edozer, asko, gutxi, gehiago, gutxiago, batzuk, etc.
Por ejemplo:
Hainbat herritan egon naiz.
He estado en varios pueblos.
Y ojo, que algunas de esas palabras pueden tener también función pronominal, cuando no van con un sustantivo:
Hainbatetan egon naiz han.
He estado allí varias veces.
Verbos concretos y locuciones verbales
Algunos verbos muy concretos como bihurtu o izendatu suelen requerir mugagabe:
Zuzendari izendatu naute!
¡Me han nombrado jefe!
Y las locuciones verbales son verbos concretos que están formados por un sustantivo + un verbo. En dichas locuciones, el sustantivo va en mugagabe. Así por ejemplo:
Musu eman diot.
Le he dado un beso.
El caso de declinación partitivo (-ik)
Este caso de declinación exige siempre el mugagabe. Por ejemplo:
Ez dut astirik horretarako.
No tengo tiempo para eso.
El caso de declinación prolativo (-tzat)
Este caso exige también siempre el caso indeterminado. Ejemplo por aquí:
Babotzat jo naute.
Me han tomado por tonto.
El caso de declinación instrumental (-z)
Y aquí, cuando el instrumento es desconocido, empleamos el mugagabea. Veamos un ejemplo:
Eskuz egindakoa da.
Está hecho a mano.
Varias expresiones concretas
De la misma manera, existen varias expresiones de espacio-tiempo que requieren mugagabea.
Algunas de las expresiones de este tipo más frecuentes son, entre otros:
- Con líquidos:
Izerditan dago!
¡Está sudando!
- Con varios fenómenos climáticos:
Elurretara joango naiz!
¡Voy a ir a la nieve!
- Con la derecha y la izquierda:
Bidegurutzean ezkerretara jo.
En el cruce ve hacia la izquierda.
- Con expresiones concretas de otras palabras como belar, lore, su, ke, eguzki, ilargi, argi, itzal, lo, amets, meza, etc:
Belarretan etzanda gustora nengoen.
Estaba a gusto tumbado en la hierba.
- Expresiones de modo:
Gezurretan ari da…
Está mintiendo…
- Para hablar de épocas vitales:
Txikitan zoriontsuago nintzen.
De pequeño era más feliz.
Estructuras gramaticales concretas
Ciertas estructuras necesitan el mugagabea. Una de las más comunes es “-r(en) bat”, que se usa para decir “algún”:
Ordenagailuren bat erosi beharko dut.
Tendré que comprar algún ordenador.
Errores comunes
Para terminar vamos a mostrarte varios errores típicos para que estés al tanto y puedas evitarlos:
A veces la forma determinada e indeterminada es la misma
¡Y no hay ningún problema con ello! Simplemente se diferencia la declinación atendiendo al contexto.
Por ejemplo, así diríamos en euskera “Voy a ir al concierto con 3 amigos”:
Hiru lagunekin joango naiz kontzertura.
Esos amigos son desconocidos, por lo que se usa la marca de mugagabea –(r)ekin:
lagun + -(r)ekin = lagunekin
Pero mira cómo queda la frase si esos 3 amigos son conocidos, es decir, “Voy a ir al concierto con los 3 amigos”:
Hiru lagunekin joango naiz kontzertura.
¡Es igual que la anterior! Eso se debe a que la marca de plural es –ekin:
lagun + -ekin = lagunekin
Por lo que en casos como ese toca diferenciar si el sujeto es conocido o no mediante el contexto de la oración.
Ojo con las -a orgánicas (-a itsatsia)
En euskera el artículo singular es –a. Pero hay palabras que tienen de por sí esa –a a las que no se añade dicho artículo.
Y, claro, como esas palabras tienen una –a propia, al declinarlas hay que mantenerla.
Por ejemplo, “la casa” en euskera es etxea, y para decir “a la casa” cogeríamos la palabra sin artículo (etxe) y la añadiríamos la marca de declinación de NORA singular: etxera.
Una de las tantas palabras con –a orgánica es, por ejemplo, probintzia (provincia). La –a de esa palabra es propia: “probintzi” no existe.
Es por eso que para decir “a la provincia”, se dice probintziara, y no “probintzira”.
Vamos, que debes tener cuidado con las palabras con –a itsatsia, ya que suelen ocasionar confusión, sobre todo, al declinarlas en mugagabe.
Infografía
Para acabar, ¡Aquí tienes una infografía que resume todo lo explicado!